- La hemorragia posparto es una complicación con una morbilidad y una mortalidad importantes
La hemorragia posparto se define como una pérdida de sangre mayor de 500 mL en un parto vaginal o de 1.000 mL en un parto por cesárea. Es una emergencia obstétrica importante para los anestesiólogos, ya que requiere una reanimación hemodinámica intensiva, se asocia a un aumento de morbilidad para la madre y, con frecuencia, es necesario su ingreso en unidades de cuidados críticos. La incidencia de esta complicación ha aumentado durante la última década debido al incremento en el número de cesáreas, a mayor frecuencia de embarazos múltiples y la edad materna más avanzada.
Los autores del trabajo que se comenta aquí estudiaron la incidencia, los factores de riesgo y las secuelas de la hemorragia posparto. Para ello utilizaron el registro NIS (Nationwide Inpatient Sample), que es una base de datos pública que incluye aproximadamente al 20% de todos los pacientes atendidos en los hospitales de Estados Unidos. Para crear una muestra representativa, se incluyeron los centros según cinco características: región geográfica, propiedad (pública o privada), localización (urbana o rural), docencia universitaria o no y número de camas. Se recogieron datos sobre la admisión hospitalaria, como la edad, el diagnóstico y el procedimiento realizado, mediante la ICD-9 (International Classification of Disease); el tiempo de estancia hospitalaria y el destino al alta. Se revisaron los datos de más de 8 millones de pacientes durante el periodo de estudio, que comprendió desde 1995 hasta 2004. Las variables recogidas estaban limitadas a la codificación ICD, pero se registraron los factores de riesgo como edad materna, tipo de parto (vaginal, trabajo de parto y cesárea), hipertensión arterial (esencial, inducida por el embarazo, preeclampsia o eclampsia), diabetes mellitus (preexistente o gestacional), miomas uterinos, polihidramnios, corioamnionitis, trabajo de parto prolongado, parto inducido, gestación múltiple, prematuridad y hemorragia gestacional por inserción anómala de la placenta. Las posibles complicaciones de la hemorragia posparto son el fallo renal, la insuficiencia respiratoria, la sepsis, la ventilación mecánica prolongada (superior a 96 horas), la coagulopatía y la histerectomía.
Se recogieron los datos de 876.641 admisiones hospitalarias de gestantes; de ellas, 25.654 tuvieron una hemorragia posparto, por lo que la incidencia fue del 2,93%. Las causas más frecuentes de esta complicación fueron la atonía uterina (79%), la placenta retenida (10%) y la coagulopatía (5%). La hemorragia posparto aumentó un 27,5% entre 1995 y 2004, debido a la mayor incidencia de atonía uterina. Los factores de riesgo independientes de sufrir una atonía uterina que requiere una transfusión de hemoderivados fueron: una edad materna superior a 40 años o inferior a 20 (respecto a las mujeres de 20 a 34 años), el parto por cesárea, la hipertensión arterial durante la gestación, el polihidramnios, la coriamnionitis, la gestación múltiple, la placenta retenida y la hemorragia vaginal antes del parto. La hemorragia posparto puede causar complicaciones muy graves, que son consecuencia de la hipovolemia y la transfusión masiva: fallo renal (29%), fallo respiratorio (24%), ventilación mecánica prolongada (16%) y coagulopatía (11%), así como una importante mortalidad (19%).
La principal limitación del estudio es la recogida de datos retrospectiva. Los trabajos futuros deberían ser prospectivos y recoger información clínica como el volumen estimado del sangrado, los valores de hemoglobina, detalles de la comorbilidad materna y las características del parto.
Los autores del trabajo concluyen que la hemorragia posparto es una complicación con una morbilidad y una mortalidad importantes. La atonía uterina es la etiología principal de esta complicación y es más difícil de predecir que una inserción anormal de la placenta. El diagnóstico precoz y una reanimación intensiva pueden limitar las secuelas para la madre.
Bateman BT, Berman MF, Riley LE, Leffert LR. The epidemiology of postpartum hemorrhage in a large, nationwide sample of deliveries. Anesth Analg. 2010; 110: 1.368-1.373.