SEFH (1)
–Una sola historia para cada paciente y válida en todo el país, o incluso en Europa ¿es una utopía?
–No, no es una utopía, es un futuro más o menos cercano: la tecnología está aquí y debemos contemplarla para reorientar nuestra profesión.
–¿Cuáles son actualmente los principales escollos en el camino hacia la historia clínica única y compatible?
–Para lograrlo necesitamos políticas sanitarias y estructuras organizativas que lo permitan. Necesitamos unificar la información procedente de distintos niveles asistenciales, incluso de distintos modelos sanitarios, públicos y privados, y esto supone un gran reto.
–Hablemos de las sesiones plenarias, dedicadas al «Cambio de modelo de atención sanitaria» y «El farmacéutico en la historia del paciente». ¿Cuáles son los objetivos que se han planteado en su organización?
–El Congreso de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria pretende ser un foro donde discutir nuestro futuro. Es evidente que el modelo sanitario actual tiene una serie de retos importantes, como el cambio del perfil de paciente; nos encontramos con un paciente pluripatológico, crónico, cada vez más activo y experto. Además de una situación económica difícil que nos demanda optimizar los recursos. Todo ello se quiere abordar en la sesión plenaria dedicada al Cambio del modelo sanitario y que finaliza con una reflexión del papel del farmacéutico en este nuevo modelo.
En la sesión plenaria del jueves, «El farmacéutico en la historia del paciente» se pretende describir la aportación del farmacéutico en la salud del paciente.
–En el programa también llama la atención que cada día del congreso tiene un lema: Un paciente, una historia; Un paciente, un farmacéutico, y Un paciente, un resultado. Explíquenos por favor esta secuencia…
–Hemos dividido el programa en tres grandes bloques, con una identidad clara y concreta cada uno de ellos.
El primer bloque, Un paciente, una historia, hace referencia a la necesidad de disponer de un único registro por paciente. Se analizarán los cambios en el sistema sanitario; las nuevas tecnologías y la historia clínica y farmacoterapia única; así como el papel del farmacéutico en el nuevo modelo.
El segundo día, Un paciente, un farmacéutico, pretende analizar las actividades realizadas por el farmacéutico y la capacitación necesaria para llevarla a cabo; su habilidad para colaborar con otros profesionales buscando alianzas que reviertan en una mayor eficiencia, y seleccionando áreas o situaciones para desinvertir, liberando así recursos para otras áreas.
El tercer y último bloque, Un paciente, un resultado, se centra en los resultados, concretamente en las herramientas de apoyo para optimizar el rendimiento de nuestro trabajo y en cómo establecer el valor del resultado de la atención farmacéutica en términos de salud: seguridad y eficiencia.
–Una mesa redonda se dedica a El farmacéutico en el nuevo modelo sanitario. ¿Qué papel tendrá?
–Debemos reorientar nuestra profesión a las nuevas necesidades que se vayan generando en el sistema sanitario y en el paciente; por ejemplo, debemos contemplar el paciente crónico, polimedicado, etc., y considerar al paciente en toda su globalidad, no solo el proceso agudo.
Cada vez más trabajaremos en organizaciones sanitarias integradas donde tendremos que crear alianzas con otros profesionales de todos los niveles asistenciales. El farmacéutico deberá orientar su actividad hacia la atención centrada en el paciente e integrarse en el equipo asistencial.
Olatz Ibarra Barrueta
Presidenta del Comité Científico
«El farmacéutico deberá orientar su actividad hacia el paciente e integrarse
en el equipo asistencial»