Un diagnóstico precoz y correcto es fundamental en la evolución de los pacientes, independientemente de la patología; además, supondría un ahorro de tiempo administrar el tratamiento correcto en una primera instancia. Para lograr estas realidades, no solo es necesario el personal sanitario, sino herramientas que permitan establecer patrones y poder predecirlos, como el big data y la inteligencia artificial (IA).
Vall d’Hebron ha sido escogido para participar en un proyecto piloto para acelerar la diagnosis de la COVID-19 mediante un software de inteligencia artificial que determina la presencia de neumonía en los pulmones a través de una tomografía computarizada (TAC) de tórax. El proyecto, llamado “Sistema de inteligencia artificial para la diagnosis rápida de la COVID-19 con un TAC”, está impulsado por la Unión Europea (UE) a través de la Comisión Europea.