- La enfermedad renal crónica constituye un potente predictor de enfermedad cardiovascular.
- El pronóstico en medicina es factible gracias a los modelos de predicción. Un buen modelo de predicción debe cumplir 4 características: validez interna, validez externa, discriminación y calibración.
- Los eventos ateroscleróticos pueden pronosticarse más fácilmente con las escalas de Framingham (FRS-CVD) y de la ACC/AHA 2013 (ASCVD) en una población definida como de alto riesgo cardiovascular, de forma independiente al modelo ajustado a función renal y antecedente de enfermedad cardiovascular aterosclerótica.
Un estudio estratégico de la Sociedad Española de Nefrología (SEN) y liderado por el grupo de investigación en Nefrología del Instituto de Investigación Biomédica de Lleida, que ha contado con la participación de más de 80 centros de Nefrología, analiza la grasa acumulada en placas en las arterias de 2.500 pacientes con enfermedad renal crónica (ERC) para valorar si la detección precoz con ecografía permite implantar medidas de prevención y evitar problemas cardiovasculares. Además, las muestras de sangre y DNA permitirán encontrar nuevos predictores de riesgo cardiovascular (biomarcadores emergentes) y valorar la susceptibilidad genética de los pacientes que tienen enfermedad renal.
El Institut Català de la Salut (ICS) ha puesto en marcha un módulo informático que permite advertir a los médicos sobre los fármacos que pueden ser perjudiciales para los enfermos del riñón y les sugiere alternativas. La aplicación está vinculada al Programa de enfermedad renal, que se incluye dentro la aplicación Inteligencia activa de la Estación clínica de atención primaria (ECAP).