Los resultados del ensayo mostraron que ambos grupos de pacientes experimentaron una mejora en la adherencia; una mejora que fue ostensiblemente superior (38% más) en el grupo intervención. “En el grupo intervención la mejora fue del 72%, mientras que en el grupo control esa mejora se quedó en el 34%. Ya sabíamos que en los ensayos los grupos placebo también tienden a mejorar por el simple hecho de saber que los están controlando, pero la diferencia es importante. Los pacientes del grupo intervención tuvieron más del doble de probabilidades de pasar a ser adherentes en comparación con los pacientes del grupo control”, destaca Ana Díez, miembro de Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (SEFAP) y una de las investigadoras principales del estudio.
Aunque actualmente los farmacéuticos de atención primaria en la Comunidad de Madrid no están ubicados en los centros de salud, Díez considera que este estudio demuestra que el farmacéutico de atención primaria “es un agente más dentro del sistema sanitario que podría hacer una actividad complementaria y de apoyo a las que ya se vienen realizando desde los centros de salud para mejorar la adherencia”. Una mejora de la adherencia que, en palabras de la miembro de SEFAP, “acabaría revirtiendo en beneficio del estado de salud de los pacientes y del propio sistema sanitario”.
Cabe destacar que este ensayo recibió el Premio Extraordinario al mejor proyecto de adherencia del año en la categoría de Atención Primaria en los Premios OAT Adherencia 2022.