Reproducimos a continuación sus resoluciones sobre la epidemia y sobre el uso de uso de terapias no aprobadas en la infección por el virus del Ébola:
Sobre la epidemia de Ébola
1. La AMM felicita a los países que han comprometido recursos para la creación urgente de nuevos tratamientos y centros de aislamiento en los países y regiones más afectados. La AMM insta a todas las naciones a comprometer más ayuda para combatir la epidemia.
2. La AMM pide a la comunidad internacional, a través de las Naciones Unidas y sus organismos y organismos de ayuda, proporcionar inmediatamente los equipamientos PPE para proteger al personal de salud y personal auxiliar y reducir el riesgo de infección cruzada. Esto debe incluir la cantidad adecuada de guantes, máscaras y batas, la distribución debe incluir los centros de atención en todos los niveles.
3. La AMM pide a los encargados de la gestión de la epidemia, incluidos los gobiernos locales y nacionales y organizaciones como la OMS, asegurar la formación adecuada en medidas para controlar la infección, incluido el PPE, para todo el personal que puede estar en contacto con sustancias infecciosas.
4. La AMM rinde homenaje a los que trabajan en estas circunstancias excepcionales y recomienda encarecidamente que los gobiernos nacionales y los organismos internacionales ofrezcan a las partes interesadas formación y ayuda para disminuir los riesgos que enfrentan al atender a pacientes y tratar de controlar la epidemia.
5. La AMM pide a los gobiernos nacionales y locales que aumenten la información a la opinión pública sobre las prácticas básicas para controlar la infección.
6. La AMM pide a la OMS que facilite la investigación sobre la mayor eficacia y rapidez para las intervenciones internacionales, de manera que la planificación y la respuesta a futuras emergencias sanitarias sean mejores.
7. La AMM insta encarecidamente a todos los países, en especial a los que todavía no están afectados, a informar al personal de salud sobre la situación actual, además de reforzar las metodologías de control de infecciones y el rastreo de los contactos, a fin de evitar el contagio en sus países.
8. La AMM pide a todas las AMNs que contacten a sus gobiernos nacionales para que sigan las recomendaciones de este documento.
Uso de terapias experimentales
Respecto a este punto, la asamblea de la AMM apoya con firmeza la intención del párrafo 37 de la revisión hecha en 2013 de la Declaración de Helsinki, que estipula lo siguiente:
"Cuando en la atención de un enfermo las intervenciones probadas no existen u otras intervenciones conocidas han resultado ineficaces, el médico, después de pedir consejo a un experto, con el consentimiento informado del paciente o de un representante legal autorizado, puede permitirse usar intervenciones no comprobadas, si, a su juicio, ello da alguna esperanza de salvar la vida, restituir la salud o aliviar el sufrimiento. Tales intervenciones deben ser investigadas posteriormente a fin de evaluar su seguridad y eficacia. En todos los casos, esa información nueva debe ser registrada y, cuando sea oportuno, puesta a disposición del público".